El Salón Internacional de la Química de Fira de Barcelona, Expoquimia, ha organizado una jornada técnica para debatir el presente y el futuro de las centrales eléctricas termosolares.
El Salón Internacional de la Química de Fira de Barcelona, Expoquimia, ha organizado una jornada técnica para debatir el presente y el futuro de las centrales eléctricas termosolares (CET) que, en los últimos años están experimentando un importante auge tanto en España como en el resto del mundo. Según la Agencia Internacional de la Energía, las CET pueden contribuir hasta en un 7% en la reducción de emisiones de C02 a la atmósfera hacia el año 2050. La jornada, diseñada por la comisión de Energías Alternativas de Expoquimia, pretende ayudar a la divulgación de este tipo de energías.
En los últimos años, la generación de energía eléctrica a través de centrales térmicas solares se ha convertido en una práctica muy extendida en países como Estados Unidos, Australia o España. Según los expertos, el desarrollo futuro de este tipo de instalaciones ha de superar las ideas conservadoras que se siguen tanto en su planteamiento teórico como en el uso de los dispositivos tecnológicos necesarios y que hacen que no se explote al máximo el enorme potencial de la energía solar concentrada. Así, la utilización de materiales reflectantes caros y de fluidos térmicos a temperaturas relativamente bajas hacen que la eficiencia de las CET se reduzca en un 20%.
El profesor de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, José Jacinto Monge, será uno de los principales ponentes de esta jornada que cuenta, además, con la participación de representantes de las empresas más relevantes en la construcción y gestión de este tipo de centrales.
Una central térmica solar es una instalación industrial en la que, a partir del calentamiento de un fluido mediante radiación solar, se produce la potencia necesaria para mover un alternador para generación de energía eléctrica como en una central térmica clásica. Habitualmente, la captación y concentración de los rayos solares se hacen por medio de espejos con orientación automática que apuntan a una torre central donde se calienta el fluido. Este fluido puede ser, entre otros, aire, vapor de agua, sodio fundido o sales fundidas, según la tecnología escogida.
En España, una de las mayores centrales eléctricas termosolares se encuentra en la localidad sevillana de Sanlúcar la Mayor, que entró en funcionamiento en 2007 y que está conectada a la red eléctrica. La torre tiene una altura de 114 metros y su campo solar está formado por 624 heliostatos.
Eduardo Pérez Moya, eperezm@firabcn.es