Enel tiene en Priolo Gargallo (Siracusa, Sicilia) la central solar termoeléctrica Arquímedes, la primera en Italia que utiliza la tecnología de sales fundidas para conducir el calor.
Enel señala que la central solar termoeléctrica de Sicilia fue pionera en integrar una instalación de ciclo combinado de gas natural y una central termosolar para la generación de electricidad.
La termosolar Arquímedes fue la primera en el mundo que utilizó sales fundidas como fluido de transferencia de calor y es también la primera en el mundo en integrar una instalación de gas de ciclo combinado y una central de energía solar térmica para la generación de electricidad.
La tecnología termosolar utiliza un conjunto de espejos parabólicos para concentrar los rayos del sol en los conductos de un fluido. Esta última, recogida en tanques especiales, se puede utilizar para alimentar un generador de vapor. La tecnología utilizada en la termosolar de Priolo fue desarrollado por Enea.
Las sales fundidas utilizados en el sistema son una mezcla de nitratos de sodio y potasio, que puede acumular el calor por periodos prolongados. La capacidad de la central termosolar es de unos 5 MW, diez veces menos que las españolas, lo que representa un ahorro anual de 2.100 toneladas equivalentes de petróleo y reducir las emisiones de dióxido de carbono en cerca de 3.250 toneladas.
La central de energía solar termoeléctrica consiste en un campo de unos 30.000 metros cuadrados de espejos (los colectores parabólicos) que concentran la luz solar en 5.400 metros de tubo que transporta el fluido de sales fundidas. La energía térmica cosechado por el sistema produce vapor de alta presión que se canaliza hacia las turbinas de la central para producir electricidad, reduciendo el consumo de combustibles fósiles y, en consecuencia, mejora del comportamiento medioambiental de la planta de ciclo combinado.
Los colectores solares (los espejos parabólicos y tubos o receptores), junto con un generador de vapor y dos tanques de almacenamiento de calor – una fría y caliente – constituyen la parte del sistema solar. Cuando el sol brilla, el fluido térmico desde el tanque de frío se distribuye a través de la red de colectores cilindro parabólicos, donde se calienta a una temperatura de 550 ° C y se inyecta en el depósito de agua caliente, donde se almacena la energía térmica.
El líquido se pasa luego del foco caliente para producir vapor a alta presión y alta temperatura, que se envía a la central de Enel de ciclo combinado, donde contribuye a la generación de electricidad. Este sistema permite a la termosolar generar electricidad en cualquier momento del día y en cualquier tiempo hasta que la energía almacenada se agota.
La termosolar Arquímedes puede almacenar el calor del sol durante varias horas para luego generar electricidad de noche o con el cielo cubierto. De esta forma, superará una de las principales limitaciones de la energía solar termoeléctrica, que es su dependencia de las condiciones meteorológicas o del momento del día.
La tecnología termodinámica solar utiliza una instalación de canal parabólico para concentrar los rayos del sol en unas tuberías que contienen un líquido. Éste es almacenado en unos depósitos y es utilizado posteriormente para alimentar un generador de vapor.