El sector de la energía termosolar ha tomado forma, con un total de 638,4 MW instalados a finales de 2010, de los que la mayoría (632,4 MW) se concentran en España, 5 MW en Italia y 1 MW en Francia.
Por segundo año consecutivo, las nuevas instalaciones de producción de agua caliente y colectores solares han decrecido en Europa, según el ‘Barómetro EurObserv’ER’. El informe revela que la superficie total térmica instalada en Europa en 2010 fue de 3,8 Mm2, frente a los 4,2 Mm2 en 2009 y los 4,6 Mm2 de 2008, siendo España el segundo país, con 402.000 m2, por detrás de Alemania (1,61 Mm2).
El sector de la energía termosolar ha tomado forma, con un total de 638,4 MW instalados a finales de 2010, de los que la mayoría (632,4 MW) se concentran en España, 5 MW en Italia y 1 MW en Francia. A principios de 2011, en España había 22 proyectos termosolares, mayoritariamente de tecnología cilíndrico parabólica, en construcción, que suman una potencia global de 998 MW.
En el área termosolar, el último barómetro europeo señala que el "futuro es prometedor". A pesar del protagonismo español, el informe europeo destaca que otros seis países prevén desarrollar esta tecnología, según sus planes nacionales de energía.
Mientras, la crisis continúa ensombreciendo el mercado solar térmico en Europa, donde la recesión en el sector de la construcción y el desafío que suponen los sistemas fotovoltaicos para este sector, están modificando el panorama. El barómetro recuerda que, en España, la principal asociación del sector (ASIT) reclama al Gobierno una prima, como la que percibe el resto de las renovables, que permita reactivar el sector y hacerlo más competitivo.